sábado, 22 de octubre de 2011

El mejor restaurador es Jesús


Restaurando a las familias y a los matrimonios
Después de la caída, aunque Adán y Eva siguieron siendo del mismo hueso y de la misma sangre, su relación como pareja no fue la misma. Desde el libro de Génesis 3 encontramos a una pareja, un matrimonio, una familia quebrantada por el pecado.
Desde que apareció la ropa en el jardín del Edén, se rompió la comunión que tenían como pareja y su relación con Dios.
Por la transgresión de ellos dejó de existir la transparencia de pensamiento, intimidad sexual, las emociones en la comunicación. La primera pareja dejó dañados a sus descendientes y los roles en la familia entraron en controversia.
Por la transgresión, el pecado y la desobediencia no se ha dejado de sentir en el matrimonio los problemas y conflictos. Los matrimonios de hoy, sin la existencia de Dios en sus vidas, son un rotundo fracaso, porque se han abandonado los conceptos bíblicos y estructuras matrimoniales establecidos por Dios.
Por la transgresión, estamos viviendo en un mundo caído y las familias, los matrimonios están siendo golpeados duramente. Existe una necesidad de ser restaurados para recobrar aquella transparencia que alguna vez existió en el Edén.
Por la transgresión y la impotencia del hombre por sí mismo de salvar su matrimonio; el propósito de Dios es restaurarlos mediante la muerte de Su Hijo Jesucristo, entregándole nuestro matrimonio para ser semejantes a Cristo en relación con su Iglesia.
Para la restauración de nuestro matrimonio y nuestras familias necesitamos tomar decisiones prioritarias que nos darán dirección para un matrimonio sólido e indisoluble.
  • Aceptar la autoridad de Dios en nuestro hogar
  • Aceptar a Jesucristo como Salvador y ejemplo del matrimonio
  • Aceptar que el amor y la abnegación es primordial en nuestro hogar
  • Aceptar que la Iglesia es el centro de adoración y edificación para nuestro hogar.
  • Aceptar los roles que la Biblia enseña para los matrimonios.
  • Aceptar ser moldeados a semejanza de Cristo en medio de los problemas y adversidades que la familia y los matrimonios pasan a diario.

  • Principios bíblicos para el matrimonio
Introducción:
Al contemplar Adán a su mujer, a la mujer que Dios le dió por compañera, contemplemos 5 principios bíblicos que unen a dos personas, para formar un matrimonio y una familia. Adán entendió que fue creado y llamado para:

DEJAR A: … y formar una unidad exclusiva y duradera con su compañera.
debe dejar de depender de sus padres
no ponerlos en primer lugar ( hay que honrarlos, respetarlos, visitarlos, pero tenemos que guiar a nuestra propia familia).
es con el propósito de seguir los mandatos de Dios y evitar que el “comején” destruya nuestro hogar.

Es a la inseparable comunidad familiar y patriarcal donde Dios nos destina a separarnos para formar una nueva vida independiente de ellos.. “por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre” Genesis 2:24

UNIRSE A: … para una entrega personal de uno para con el otro en la abnegación.
con el compromiso de amar
con el compromiso de aceptar
con el compromiso de vivir toda la vida (hasta que la muerte los separe)
con el compromiso de vivir todas las cosas en común.

Cuando Dios creó a la primera pareja la instituyó como algo natural de vínculo permanente y exclusivo al unirse.. “… y se unirá a su mujer” Genesis 2:24(b)

SER UNO: … con el mandamiento de multiplicarse; el hombre es 1 multiplicado por la mujer que también es 1, el resultado es igual a 1. Ejemplo: HxM = HM ó 1x1=1 en matrimonio, luego, procrearse. Esto se encuentra en consumación sensible y máxima en la unión de los cuerpos.
ser una sola carne
con intimidad conyugal
con intimidad emocional
con intimidad espiritual
con transparencia entre los cónyuges y un compañerismo total.

De modo que ya no son dos, sino una sola carne, sin que nadie en la tierra los pueda separar Mateo 19:6
“y serán una sola carne” Genesis 2:24(b)
“y estaban desnudos y no se avergonzaban” Genesis 2:25

UN COMPROMISO ESPIRITUAL COMO CABEZA DEL HOGAR AL UNIRSE A SU MUJER, QUE SIGNIFICA LA UNIÓN DE CRISTO CON LA IGLESIA Efesios 5:32.
con el propósito de reflejar la imagen de Dios
con el propósito de reflejar el conocimiento de Dios (ésta es hueso de mis huesos)
con el propósito de reflejar la santidad de Dios (estaban desnudos)
con el propósito de reflejar la justicia de Dios (aceptó a su mujer)
con el propósito de estar en comunión con Dios (Dios se paseaba en el huerto)
con el propósito de ser agentes biológicos (multiplicación)
con el propósito de adorar a su Creador Salmos 96:7-8
con el propósito de formar e instruir a los hijos para adorar a Jehová.
Qué complicado se volvió para Adán y Eva este papel de instruir a los hijos, con la experiencia de Caín y Abel podemos notar lo difícil que fue para ellos. Por eso, desde pequeños, debemos pastorear a nuestros hijos para que el corazón de ellos sea transformado.
con el propósito de vivir sometidos bajo la ley de Dios y cumplir su voluntad libremente, “de todo árbol puedes comer, más del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás, el día de del él comieres, ciertamente morirás” Genesis 2:15-17
con el propósito de cumplir con los papeles o roles que Dios definió para la marcha del matrimonio.
Estos propósitos de Dios para el matrimonio hoy se encuentran distorsionados a causa del pecado y la desobediencia, por ello, el propósito de Dios es restaurar el matrimonio, la familia, para ser semejantes a Cristo y su relación con la Iglesia.

ACEPTAR LA PROVISIÓN PERFECTA DE DIOS. Después de que Dios creó a la mujer se la presentó a Adán ¿cuál fue la reacción de Adán? La perspectiva perfecta y en armonía que tenía Adán de Dios hizo que:
aceptara a la mujer como compañera
aceptara a la mujer como regalo de Dios
aceptarla con el deber de amarla
aceptar a su mujer, no por su comportamiento, sino confiando en la elección que Dios le hizo a él.
El conocimiento claro en Dios, su integridad y fidelidad a Dios, lo impulsó a aceptar a la compañera que Dios le había traído, el cual le hizo exclamar: “esta es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne, será llamada varona, porque del varón fue sacada” Genesis 2:23
Estos principios me hacen ver, que el estar bien con Dios me hace aceptar a mi pareja a pesar de sus debilidades, fragilidades, etc. El no aceptar a tu cónyuge o cambiarla por otra es una muestra de que tu vida espiritual como familia o matrimonio está en bancarrota.

Causas comunes que arman conflictos en el matrimonio

EL PROBLEMA DEL CONTROL EN EL HOGAR.
hombre: ¡En el hogar el que manda soy yo!
mujer: ¡sí, pero cuando tú no estás!
hombre: ¡yo soy la cabeza!
mujer: ¡pero yo, el cuello que la mueve!

EL PROBLEMA DE LA ECONOMÍA
mujer: no hay dinero para el gasto, eres un flojo, bueno para nada, no eres responsable para darle de comer a tus hijos.
hombre: es tu problema, yo te doy dinero que sólo lo gastas en tus porquerías cosméticas y malgastas el dinero.
mujer: ¡Dios mío, con qué tipo me vine a casar!

EL PROBLEMA DE LA EDUCACIÓN DE LOS HIJOS
mujer: no sabes educar a tus hijos, eres un mal ejemplo, solo yo me esfuerzo por educarlos.
hombre: educar a tus hijos es tu responsabilidad, por eso me fajo en el trabajo de día y de noche ¡Deja de regañar a mi hijo!
mujer: ¡entonces, edúcalo tú!

EL PROBLEMA DE LA RELACIÓN CONYUGAL
mujer: te estaba esperando anoche para dormir juntos y no quisiste.
hombre: ¡ay, mujer! Estoy cansado por tanto trabajo que tuve y aparte los años no pasan en balde, ¿me comprendes?
mujer: ¡no! Sólo no quieres nada conmigo, seguramente tienes a otra, pero ya verás también.
hombre: deja de fastidiarme, porque estoy harto y fastidiado de que no bajes de peso, te soy sincero, ya no me atraes estás gorda etc. ¡qué lío! ¿verdad?

EL PROBLEMA DEL TIEMPO CON LA FAMILIA.
mujer: sólo llegas, tiras tus cosas y te vas con tus amigos, a mí no me tomas en cuenta, ¡por qué no te vas a vivir con tus amigos!
hombre: ¡Qué! Tú no eres nadie para venir a mandarme y decirme qué puedo o no puedo hacer. La mujer es para la casa, el hombre para la calle.
mujer: eres un cínico, no tienes vergüenza, sólo me tomas en cuenta cuando estás en problemas y cuando necesitas que te ayude a pagar tus deudas.
hombre: ¿qué quieres decir? ¿qué dependo de ti para hacer las cosas? ¡cállate antes de que te lance una bofetada ahora!

EL PROBLEMA DE LA IGLESIA.
mujer: ¡Qué! ¿ir a la iglesia? Eres anciano, diácono, pastor, evangelista; un poco más y llevas tu hamaca para vivir en el templo. Tratas muy bien a los hermanos, pero mira cómo me tratas a mí. ¡Predicador vive lo que predicas!
hombre: lo mismo te digo, de qué te sirve golpearte en el pecho con tu reunión femenil, si eres una chismosa y peleonera.
mujer: ¡de qué hablas! Si haces tú lo mismo hipócrita. Esas reuniones consistoriales son pérdidas de tiempo, mejor haz algo productivo, pónte a trabajar. Ahí están tus hijos siguiendo tu ejemplo, sólo son unos vagos, por eso yo no voy a la iglesia, para no ser como tú.
hombre: ¡Vete al infierno con todo y tus chanclas!

Hermanos, veamos el conflicto tremendo en que han caído los matrimonios, el cuál daña a la familia completa. Sólo se está pensando en los intereses personales, propios e individuales.
¿Y los hijos? ¿cuándo entran en los planes?
El fracaso de nuestros hijos, su carácter, sus actitudes, sus frustraciones, son por vivir dentro de una familia que nunca los preparó adecuadamente para enfrentarse a la vida.

Cuál es tu problema como pareja? Cómo podrías mejorar?
Escríbelo aquí:
ESPOSO
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QUE TE GUSTARIA DE TU ESPOSA
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ESPOSA
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QUE TE GUSTARIA DE TU ESPOSO
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Consecuencia de los problemas en nuestro matrimonio
Introducción:
Un matrimonio en desobediencia a los lineamientos que Dios ha trazado para el matrimonio acarrea consecuencias en su vida matrimonial y familiar.
Aquí hay algunas consecuencias de violar los lineamientos de Dios en el matrimonio.

La pareja se encuentra en total miseria y abandono a su propio camino.
La pareja vive en total desconfianza. Por el pecado que los ata en cualquier momento se puede ocasionar un divorcio.
La pareja compuesta entre el hombre y la mujer como matrimonio ahora vive en pleito constante (nadie da su brazo a torcer).
En el seno del hogar prevalece los propios intereses personales y particulares de cada uno, ya sea, el del hombre o de la mujer.
El fruto de la unión que son los hijos, salen rotundamente dañados, se vuelven inseguros, desconfiados, traumados, con daños sicológicos, etc.
En la pareja existe una lucha de poder a poder. Pelean para ganarse un pedazo de hogar y gobernar (qué horrible es vivir así)

¿Cuál es la solución a ese problema?¿por qué existen matrimonios” cristianos” de 10, 15, 20 años de casados y siguen con los mismos problemas?
El problema del hombre

Culturalmente, es el rey y máxima autoridad en el hogar que acepta a la mujer como brazo de ayuda idónea para:
ayudarlo en el trabajo
ayudarlo a pagar sus deudas
ayudarlo a mantener pulcra su personalidad
con responsabilidad de educar a los hijos
con responsabilidad de relaciones conyugales
hombre no da su brazo a torcer, cuando la mujer lo necesita

La actitud del hombre después del trabajo:

toma el control y prende el televisor
se mete al cuarto a dormir
se pone a estudiar un libro
enciende la computadora y sigue trabajando en sus cosas en casa
toma el teléfono y se dedica a llamar a sus amigos.
a la hora de ir a la Iglesia, toma una actitud negativa y aburrida.

El problema de la mujer
Culturalmente, la mujer es sumisa, era sumisa por obligación, ahora por el modernismo y la aparición de la liberación femenina, se ha tornado en una persona complicada en el matrimonio. Acepta al hombre como el proveedor, pero no como cabeza del hogar, su expresión es: -“si eres la cabeza, yo soy el cerebro que la hace funcionar”-
La mujer lo acepta como el brazo que falta en el matrimonio para:
complacer sus deseos
para educar a sus hijos
para ayudarla en los quehaceres de la casa
para sostenerla y proteger a la familia
para la relación conyugal
para manejarlo como quiere, etc.
Para que la complazca en todos sus caprichos.

En ese sentido, la mujer tampoco da su brazo a torcer cuando el hombre lo necesita, no lo acepta como representante, cabeza y autoridad dirigida por Dios.

La actitud de la mujer después del trabajo:

prende la tele para ver su novela
se acuesta a leer una revista o un libro
se va con la vecina para saber lo que está sucediendo con los demás
si hay problemas, cuando llega su esposo, se afana otra vez por sus quehaceres en el hogar
se mete al cuarto a dormir
toma el teléfono y prefiere platicar con sus amigas
si hay problemas, practica el ocio y le dice a su esposo cuando llega del trabajo: -sirve tu comida, está en el refri-
a la hora de ir a la iglesia, su actitud es pesimista y negativa, reacciona diciendo: -el pastor me cae mal, los hermanos me odian, es aburrido, no hay fuego espiritual en esa iglesia, etc.-

Esposo o esposa, para mejorar esta situación, ayúdense mutuamente con simpatía, cariño constante; si quiere que se conserve su familia de modo que sea un rayo de luz tu vida matrimonial. Ayúdense a llevar sus cargas mutuamente con bondad, con amabilidad y cortesía que demuestre aliento de aceptación y felicidad con la paz que proporciona un corazón lleno de gozo.

La intimidad en la vida matrimonial
Introducción
Intimidad: Muchos esposos han escuchado esta palabra, pero probablemente no hay comprendido el significado de esta palabra. Se encuentra en Genesis 2:18, el término indica en sentido literal “cortar para ser uno”, en otro sentido, podríamos decirlo así: amputar un brazo a un cuerpo que sólo tiene un brazo, en un lenguaje sencillo, podríamos decir, no es bueno que el hombre tenga un solo brazo, son dos brazos unidos para formar el matrimonio. Un solo cuerpo con la gran responsabilidad de vivir en la santidad de Dios e intimidad de pareja como lo fue Adán y Eva una vez Efesios 4:16
La Biblia afirma: “no es bueno que el hombre esté solo, le haré ayuda idónea” Genesis 2:18.
Desde ahí surge la práctica de la intimidad. ¿Qué es pues la intimidad en el matrimonio?

La intimidad en el matrimonio es aquella profunda sensación de conectarse el uno con el otro, es la sensación de sentirse en comunión especial con el ser que se ama profundamente, en el cual, se recibe amor, respeto, aprecio, cariño, con miras a demostrar la misma sensación.

La intimidad matrimonial es aquel sentimiento de seguridad y entusiasmo que existe entre la pareja que viven juntos en común todas las cosas que suceden a su alrededor como familia.

La intimidad matrimonial es aquella parte donde la pareja como familia se considera de un mismo sentir las cosas que suceden de manera positiva dentro de la adversidad aún los latidos mismos del corazón.

En el matrimonio se debe experimentar la intimidad espiritual, emocional, sexual y la comunicación, así también la superación como pareja en las sendas de la vida cristiana. En la intimidad matrimonial:
• se animan juntos en la adversidad
• sufren juntos los momentos difíciles y dolorosos
• programan juntos pláticas de educación y preocupación en los hijos
• platican juntos la manera de superarse como familia
• resuelven juntos los conflictos matrimoniales (si no hay, los habrá)
• planean juntos la forma de crecer como pareja cristiana.
¡Qué hermoso, qué luz brillante es un matrimonio así dentro de las tinieblas! ¿cómo es el tuyo?

Intimidad Espiritual
Es el área de la vida matrimonial menos explorada por las parejas, mientras que para otras puede llegar a ser el área donde se experimenta mayor intimidad como matrimonio. ¿Cuál es el objetivo de la intimidad espiritual? Es el crecer espiritualmente para ser semejantes a Cristo, para eso, necesito intimidad y transparencia con un tiempo juntos y solos, para:
• conversar juntos siempre sobre la importancia de tener a Dios en la vida Amos 3:3
• orar juntos siempre para pedir auxilio a nuestro Dios (Salmos 90)
• estudiar juntos siempre la Palabra de Dios Salmos 73:25-26
• adorar y servir juntos siempre en la Iglesia de Dios Efesios 2:10 y Hebreos 10:25
• soñar y visionar juntos siempre una vida digna delante de Dios Filipenses 1:27-28
• tener en la familia un devocional especial
Dignifica tu matrimonio, que tu vida realmente cumpla los propósitos de Dios como familia, que la meta de tu matrimonio sea, ser semejante a Cristo para estar juntos en comunión, adoración, oración, servicio y lectura de su Palabra, para ser vestidos de la Armadura de Dios. Eso nos protegerá de los ataques del enemigo Efesios 6:10-12

intimidad emocional y la comunicación

En el matrimonio existen emociones y deseos como también la toma de decisiones, pero a veces nos encontramos con el dilema qué decisiones tomar. Por favor, tome esta oportunidad para practicar la intimidad emocional y la comunicación con su pareja.

Revela tus sentimientos y tus emociones 1 Juan 4:18
* Escúchense mutuamente como cónyuges Proverbios 13:15
* Tengan tiempo para reflexionar sobre la marcha del matrimonio
* Tengan confianza de expresar lo que realmente sienten, pero con sabiduría
* Tengan prioridades al estar resolviendo algún conflicto
* Tengan aceptación al estar escuchándose como pareja
* Tengan el favor de aclarar las cosas que andan mal
En la comunicación, revela tus experiencias frustrantes. Seguramente tu pareja te va a escuchar.
PROBLEMAS A LA HORA DE COMUNICAR 
• La charla junta con la demanda: ¡Debo tener! En esta plática amamos más nuestros intereses, porque va con UN QUIERO
• La informativa junto con el deseo: (sólo los hechos en contra) tú eres así… tú debes… ya que tú eres así… entonces yo haré esto…
• La intelectual junto con la expectativa: (lo que pienso es lógico, sin agregarle un corazón transformado) tú deberías hacer esto… tú no deberías hacer esto… me estás diciendo que yo…
• La tolerancia junto con la conciencia y el amor abnegado. Seamos sinceros: amor, nadie es perfecto-, digamos las cosas claras pero acompañadas con amor. –La regué, pero te prometo que procuraré y trataré de no volverlo a hacer, ¿te parece?...-

Expresa en lo emocional y comunicativo la razón de tu conducta negativa que tienes
* me enojé por esto…
* te ataqué por esto…
* te ofendí por mi carnalidad…
* tengo resentimientos contra ti, porque me ofendes emocionalmente cuando dices: ¡eres una gorda, eres una frigida! Etc…
* tengo resentimientos contra ti, porque me ofendes cuando no me das de comer a tiempo, cuando me dices bruto, tonto, etc…

Esposos, esposas, matrimonios, Dios nos está llamando a cambiar, pero es necesario que tomes las decisiones ahora: Efesios 4:17-25

* Dejar tu manera antigua de actuar
* Dejar tu manera antigua de pensar
* Cambiar tu manera antigua de vivir, vistiéndote según la imagen de Cristo.

el amor y la intimidad sexual

Hoy, nuestra sociedad es bombardeada por los medios de comunicación, que al mismo tiempo, aísla a los miembros de las familias. Por el aislamiento y la comunicación del sexo de manera distorsionada por los medios, hoy las parejas no pueden desarrollarse y florecerse en la intimidad y relación conyugal, en plena satisfacción siempre habrá algo que agregar.
La intimidad sexual, con conversaciones llenas de afecto, con fuertes muestras de cariño y consideración, vitaliza el matrimonio y refuerza el amor que une a la pareja.


Los problemas en la intimidad sexual:
* cuando el cónyuge deja de tener gimnasia conyugal
* cuando desaparece el interés por el aspecto físico del cónyuge
* cuando no conversas ni expresan palabras cálidas en la relación conyugal
* cuando se practica el sexo por obligación sin amor (costumbre)
* cuando se practica el sexo, y los pensamientos están en otro lado.
El amor en el matrimonio debe aplicarse con sinceridad en todos los aspectos de la vida, también en la vida conyugar 1 Juan 3:18
Testimonio de una mujer: Cuando estoy en la cama con mi esposo le pido que me entienda, que me tenga satisfecha, que me acaricie, que me bese, que me toque frágilmente y me diga palabras dulces, pero no consigo nada. Hoy no tengo interés sexual con mi marido ¡me siento infeliz! ¿será que necesito buscar otro hombre?

Factores comprensibles:
* exceso de trabajo
* impotencia pasajera y eyaculación precoz
* debilidad producida por enfermedad
* frigidez temporal

Factores de peligro:
* castigo al esposo por portarse mal
* aburrimiento en la pareja
* intereses sexuales fuera del matrimonio
* como fuente de escape y reconciliación a un problema
* cuando sirve para chantajear a la pareja.

Factores bíblicos que norman la intimidad sexual en la pareja.
* Pongamos como fundamento las enseñanzas bíblicas que sirven de norma en las relaciones maritales 1 Corintios 7:3-5
* Un mandamiento: - el marido cumpla con la mujer -.
* Una exhortación: - no tiene potestad sobre su propio cuero – (ambos).
* Una recomendación: - no se nieguen el uno para con el otro -.

Estos conceptos sirven para la edificación saludable y satisfactoria de la intimidad en el matrimonio. Veamos las enseñanzas de este pasaje.

Que el acto sexual es lícito, deseable y necesario “el marido cumpla con la mujer el deber conyugal”.
Que los esposos no deben ser egoístas con sus cuerpos durante el acto sexual “no os neguéis el uno al otro”.
Que los cónyuges no deben poner pretextos a las relaciones sexuales, con disculpas no razonables.
Que los cónyuges deben ponerse de acuerdo en el tiempo, el día y la hora de las relaciones sexuales “y volved a juntaros en uno”.
Que los cónyuges platiquen cuándo no van a poder tener relaciones sexuales “a no ser por algún tiempo de consentimiento mutuo” 1 Corintios 7:3-5
Que entre la pareja debe existir confianza, seguridad, honor, compromiso, sacrificio, gracia, aceptación y honestidad; asimismo, estar totalmente expuesto ante la presencia de quien me ama con el compromiso de recibir placer.

Es imposible tener plenitud sexual, si no aceptas a tu pareja como la provisión perfecta de Dios.
Es imposible tener plenitud sexual, si no amas verdaderamente a tu pareja.
Es imposible tener plenitud sexual, si odias a tu compañera. ¿Cómo es eso?
Tener sexo sin las pautas bíblicas es practicar el sexo entre extraños.
En resumen, este pasaje nos muestra claramente que tanto el marido como la mujer bajo la responsabilidad y el deber moral de satisfacerse sus mutuas necesidades sexuales como matrimonio. Pero debemos tomar en cuenta que, aunque el sexo puede sazonar vidas, nunca podrá alimentar completamente nuestra alma.

Qué es lo que ya dejaste de hacer? Qué es lo que debes hacer para mejorar?

ESPOSO
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ESPOSA
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Consejos prácticos para la madurez espiritual del matrimonio 1 Pedro 3:7
Introducción:
El matrimonio es una relación humana instituida por Dios y aprobada por la sociedad, en la cual, el hombre y la mujer cohabitan en amor y ayuda mutua; pero sobre todo, en un estado honroso, ya que Dios fue su autor Genesis 2:23. Su felicidad se muestra como resultado de reflejar la Santidad de Dios y alcanzar madurez en Jesucristo. En realidad, es imposible tal estado del hogar sin Cristo, por elllo, presentamos consejos prácticos para la madurez espiritual e integral del matrimonio. Sólo sucede…

CUANDO HACEMOS UN SÓLIDO COMPROMISO Vosotros maridos…


El esposo es un hombre casado: ¿has pensado por un momento cuán grande y bueno es Dios al formar una mujer para ti, con alma y cuerpo y entregarla para que sea tu esposa, amiga y madre de tus hijos? No sólo es eso, sino que ella te quiere, te ama, te atiende, consiente y vela por tus necesidades personales. Cuántas veces ella ha soportado tu mal genio… tus indiferencias… tus malos tratos… tus momentos de soledad y angustia… lo da todo porque te ama… ¿no te has dado cuenta?

Por eso…
• ama a Dios sobre todas las cosas
• ama a tu esposa sin asperezas, dándole honor como a vaso frágil
• pídele a Dios sabiduría para gobernar y educar estimulando tu hogar
• no provoques los celos de tu esposa ni la ira de tus hijos
• sé sobrio, con carácter sereno, moderado pero templado con autoridad
• sé prudente, discreto, previsor, sabio dando ejemplo
• sé decoroso, honorable, respetuoso, honesto, con dominio propio
• no seas pendenciero, pleitista, ofensivo, sarcástico, despectivo y arrogante con tu esposa
• no seas machista, ávaro y humillante
• estimula a tu esposa, dialoga con ella, hónrala haciendo algo que le gusta, hazla sentir que todavía están en luna de miel.

Cuando obedecemos lo que la Palabra de Dios nos dice tenemos el respaldo, la respuesta y la bendición de Dios. Aquí puedes encontrar algunos deberes y cualidades tuyos. Cumpliéndolos y viviéndolos harás de tu familia un tesoro incomparable:
• Honra a tu esposo Ester 1:20
• Sé una ayuda idónea Genesis 2:18, Proverbios 31:12-27
• Sé una buena madre Tito 2:3-5
• Cumple con tu deber conyugal 1 Corintios 7:1-6
• Lleva un matrimonio honroso Hebreos 13:4, Proverbios 5:18
• Da buen ejemplo y testimonio 1 Pedro 3:1-16
• Aprende a ser fiel en todo Romanos 7:2
 Sé una buena administradora Proverbios 31:11,15
• Alaba un poco a tu marido discretamente ante los demás Proverbios 31:23
• Haz de tu hogar un lugar más grato para tu esposo e hijos Proverbios 31:28
• No ridiculices a tu marido delante de los demás Proverbios 12:4

CUANDO HACEMOS UN SÓLIDO COMPAÑERISMO vivid con ellas…
* muchos matrimonios sufren hoy por no pasar juntos más tiempo:
* cenen juntos
* salgan a pasear juntos
* duerman juntos
* vayan a comprar juntos tomados de la mano (se ve bonito)

CUANDO HACEMOS UNA SÓLIDA COMPRENSIÓN Sabiamente…
* cuando comete algún error ¿quién no comete errores?
* cuando existen problemas por malos entendidos
* cuando el esposo o la esposa se cansa por el trabajo
* cuando la esposa está enferma o en estado
* cuando la pareja tenga sus pasiones preferidas: el varón deporte, la mujer novela, etc.

CUANDO HACEMOS UNA SÓLIDA CONSIDERACIÓN Dando honor…
Debemos honrar a nuestras esposas con palabras bonitas: te amo, te ves bonita, eres muy atractiva, qué buena te salió la comida, eres una buena madre y buena esposa.

CUANDO HACEMOS UN ORDEN SÓLIDO DE PRIORIDADES
* Dios es el primer lugar en nuestra vida
* La familia es el segundo lugar en nuestra vida
* La iglesia es el tercer lugar en nuestra vida
* El trabajo es el cuarto lugar en nuestra vida.

Debemos respetar a nuestras esposas como mujeres cristianas porque son coherederas de la gracia de Dios para que nuestra vida espiritual, nuestras oraciones y nuestra comunión con Dios no tengan estorbo. Recuerde, el amor de nuestras esposas no lo puede suplir el trabajo.

Los roles bíblicos de autoridad y sumisión en el matrimonio y la familia
Introducción:
La estabilidad del matrimonio depende grandemente de que Dios sea el centro con su Palabra y el amor. Pero también, de la forma en que el esposo y la esposa cumplan con sus respectivos roles en el matrimonio y la familia. Nosotros los pastores y consejeros matrimoniales, a menudo apuntamos al “conflicto de roles” como la mayor parte o causa de los rompimientos del matrimonio. Muchos matrimonios de hoy están luchando desesperadamente con este problema.
Algunos hombres creen lo que la Biblia enseña e insisten en ser responsables por la familia. Algunas mujeres creen y se esfuerzan por someterse hasta a un tirano. Pero la defensa de la liberación femenina y los cambios de la sociedad en interpretar el matrimonio los ha consumido para que ambos se revelen a lo establecido por Dios.

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